Bogotá, 15 de enero.- El escándalo suscitado en Bolivia a raíz del soborno un “testigo estrella”, para incriminar a dirigentes opositores en un “complot terrorista”, da toda la razón a las denuncias que efectuó UnoAmérica en su oportunidad.
Los hechos son los siguientes
VEA VIDEO CLICK AQUI:
VEA VIDEO CLICK AQUI:
1. El 16 de abril de 2009, un grupo comando de la policía boliviana se introdujo en el Hotel Las Américas, ubicado en Santa Cruz, y asesinó a Eduardo Rózsa, Michael Dwyer y Árpad Magyarosi.
2. El gobierno boliviano argumentó que estos tres extranjeros estaban involucrados en un “complot para asesinar a Evo Morales y para escindir a Santa Cruz del territorio boliviano”.
3. Según el gobierno, dirigentes opositores cruceños estaban involucrados en el complot. Como prueba, presentó el testimonio del “testigo estrella” Ignacio Villa Vargas, alias “El Viejo”, chofer de Rózsa.
4. UnoAmérica denunció en aquel entonces que el triple asesinato en el Hotel Las Américas era una maniobra del gobierno boliviano para desviar la atención de la “Masacre de Pando”, orquestada por el propio gobierno para defenestrar al prefecto Leopoldo Fernández y para tomar el control del departamento de Pando. UnoAmérica acusó al gobierno de Evo Morales ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), por haber planificado y ejecutado la “Masacre de Pando”.
UnoAmérica también denunció que, con el triple asesinato, el gobierno pretendía criminalizar a la oposición cruceña, para justificar una persecución feroz en contra de sus adversarios políticos.
5. En respuesta a nuestras denuncias, el gobierno boliviano también implicó a UnoAmérica en el supuesto “complot separatista”, alegando falsamente que uno de nuestros delegados, Jorge Mones Ruíz, se había reunido con Eduardo Rózsa.
6. El 29 de abril de 2009, la Embajada de los Estados Unidos envió un cable (filtrado por WikiLeaks), identificado con el número 204756, donde asegura que el gobierno boliviano armó un falso complot para “asesinar” al presidente Evo Morales y luego culpar a sus adversarios, entre ellos a UnoAmérica.
La Embajada de EE UU afirma que Rózsa y sus compañeros fueron contratados por los servicios de inteligencia bolivianos para montar una falsa trama terrorista y justificar la persecución desatada después contra los dirigentes de Santa Cruz y contra UnoAmérica.
7. El pasado 13 de enero, el portal boliviano Erbol difundió un video (http://www.youtube.com/watch?v=kqegVDce77E), donde se muestra a un funcionario del Estado entregándole al “testigo estrella” Ignacio Villa Vargas, alias “El Viejo”, un soborno de 31.500 dólares.
Lo cual demuestra que nunca hubo un “complot terrorista” para asesinar a Evo Morales, y que fue una maniobra del gobierno para deshacerse de sus opositores y para encubrir la “Masacre de Pando”.
Frente a los hechos arriba relatados, UnoAmérica plantea dos observaciones:
1. Si los bolivianos desean recuperar su democracia deben estudiar a fondo los hechos de violencia suscitados en Pando; porque fue con esa matanza que comenzó la ofensiva del gobierno boliviano para destruir el Estado de Derecho. En este sentido, recomendamos revisar detenidamente el Informe de UnoAmérica al respecto, disponible en http://unoamerica.org/unoPAG/documentos.php?id=9.
2. La utilización de “testigos estrella”, previamente sobornados por el oficialismo, para perseguir y enjuiciar a los adversarios políticos, es un modus operandi diseñado en Cuba, e implementado por los gobiernos pertenecientes al ALBA.
Actualmente, el Presidente de UnoAmérica, Alejandro Peña Esclusa, está injustamente encarcelado en la sede de la policía política venezolana, como resultado de las presuntas declaraciones del “testigo estrella” Francisco Chávez Abarca, quien fue enviado de inmediato a Cuba para que su testimonio no pudiese ser verificado.
Esperamos que estas escandalosas revelaciones sirvan para motivar a los ciudadanos de Bolivia y Venezuela a luchar más arduamente por sus libertades.
No hay comentarios:
Publicar un comentario