El Gobierno ecuatoriano reconoció el duro golpe que Colombia les asestó a las FARC con el abatimiento del "Mono Jojoy", que se ocultaba en un campamento que, sostiene el vecino país, da muestra de la capacidad militar que tiene este grupo subversivo.
El ministro coordinador de Seguridad Interna y Externa de Ecuador, Miguel Carvajal, dijo que se trata de una acción que "obviamente consolida la presencia del Estado colombiano en su territorio" y reiteró que su país mantendrá una observación "permanente" para evitar los efectos que hechos como el ocurrido pudieran tener en su zona fronteriza.
"Lo ocurrido en días pasados revela la magnitud de la capacidad que tienen los grupos irregulares" en Colombia, comentó en una entrevista con la televisión local Ecuavisa al anotar que se trató de un campamento "en el corazón de Colombia, con bunkers de concreto y varios campamentos de protección a su alrededor".
Para el ministro, eso muestra una capacidad militar, logística operativa "muy importante" de los grupos irregulares.
"Vamos a mantener una política clara y medidas correspondientes para proteger nuestra frontera, para impedir que los impactos negativos del conflicto interno colombiano afecten al país", reiteró.
Para el ministro, "lo fundamental" es continuar con una política de "fortalecimiento" de la presencia del Estado tanto a nivel militar como con proyectos sociales, de salud, de educación, entre otros.
Víctor Julio Suárez, alias "Mono Jojoy", jefe militar de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), murió en una operación conjunta del Ejército, la Fuerza Aérea y la Policía en el departamento colombiano del Meta (centro) el pasado miércoles en horas de la madrugada.
Quito (Ecuador)
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