Roussef "abrirá un nuevo camino a las mujeres",

Brasilia, 27 oct (EFE).- La abanderada del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), Dilma Rousseff, afirmó hoy que su posible victoria en las urnas el próximo domingo "abrirá un nuevo camino a las mujeres", pues ellas también podrán "soñar con gobernar Brasil".
En un acto celebrado en Brasilia ante cientos de militantes y arropada por nueve ministros del Gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, la candidata del PT hizo un guiño al electorado femenino.
Recordó que en las últimas décadas las brasileñas "salieron de sus casas para "trabajar, estudiar y buscar el sustento de sus hijos", y dejaron de ser "solamente" amas de casa para ser también "empleadas domésticas, enfermeras, asistentes sociales o psicólogas".
Según la candidata, a quien todas las encuestas dan como clara favorita para imponerse al opositor José Serra, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), "a partir del domingo todas las mujeres de Brasil podrán decir que también pueden ser presidentas".
"Mi elección abrirá un nuevo camino para las mujeres en una de las mayores repúblicas democráticas del mundo", dijo Rousseff, y sentenció: "Si somos las madres del 48% de la población brasileña, también podemos gobernar este país".
Durante el acto, fue presentado un documento que contiene las "13 propuestas de Dilma para el desarrollo social del país", que resumen las políticas sociales aplicadas por el Gobierno de Lula, a las que la candidata reiteró hoy que dará "continuidad" y "más alcance".
La primera de las propuestas cita la "eliminación total de la pobreza absoluta en el país", un asunto en el que Rousseff dijo hoy que pondrá su mayor empeño.
Recordó que, según cifras del actual Gobierno, en los últimos ocho años un total de "28 millones de personas pudieron salir de la miseria" gracias a "las políticas de Lula", que serán "ampliadas" en caso de que logre la victoria el próximo domingo.
El documento también propone fortalecer el programa de subsidios conocido como Bolsa Familia, garantizar la asistencia social a los más pobres, ampliar los planes para reducir la pobreza rural y otros dedicados a combatir el hambre.
Asimismo, se plantea aumentar la oferta de créditos baratos para la agricultura familiar, asegurar el acceso al agua potable, seguir adelante con planes de saneamiento básico, erradicar el trabajo infantil y crear oportunidades de empleo en "los segmentos sociales en mayor situación de vulnerabilidad".
Rousseff enfatizó que "la cuestión social será, como ha sido en el Gobierno de Lula, el centro de todas las políticas", pues "las mejoras de un país no se miden por el crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) sino por las mejoras de las condiciones de vida de la población, y especialmente de los más pobres", dijo.
Aseguró, además, que, a diferencia de "muchos países ricos", el "modelo de desarrollo" implantado por Lula "incluye a todos" y "no lleva a los negros a la cárcel ni manda a muchos otros a vivir en un 'trailer", en lo que muchos interpretaron como una alusión a Estados Unidos.
Según Rousseff, si los pronósticos de las encuestas se confirman el próximo domingo en las urnas, su mayor compromiso será "dar continuidad al mejor Gobierno que Brasil ha tenido en su historia".
De acuerdo con el último sondeo, divulgado hoy por la firma Sensus, Rousseff ganará la segunda vuelta de las elecciones el domingo con un 51,9%, frente al 36,7% que obtendría Serra.
El resultado es similar, al menos en la diferencia entre uno y otro, al que arrojó una encuesta de la firma Datafolha difundida la víspera, que le atribuyó a Rousseff el 49% de la intención de voto, contra el 38% de Serra