A esta hora la capital del departamento se encuentra incomunicada con el centro del país, las autoridades viales continúan en máxima alerta y en vigilancia permanente por los continuos desprendimientos de rocas que se están registrando en este eje vial.
Según el Comandante de la Policía de tránsito y transporte de Norte de Santander, mayor William Lara, señaló que los puntos más críticos son los kilómetros 11 y 116.
Mientras tanto, más de 300 vehículos permanecen represados en este eje vial, personal de Invías trata de adelantar labores de remoción de material en medio de las lluvias que se presentan.
La temporada de lluvias, que ha afectado 515 poblaciones en 28 de los 32 departamentos del país, deja hasta el momento 1,11 millones de damnificados.
Las precipitaciones, que se han intensificado desde el pasado septiembre, se cobraron las más recientes víctimas en el nordeste y el centro del país, con un muerto y más de 300 damnificados.
La nueva víctima fatal es un soldado que fue sepultado por un alud de tierras en la zona rural de Otanche, localidad esmeraldífera en el departamento de Boyacá, según precisó el comando de la brigada del Ejército en Tunja, la capital de esta región.
La fuente explicó que Rodrigo Díaz Molina, de 37 años, perdió la vida cuando intentaba con otros uniformados desatascar el vehículo en el que se transportaban.
Mientras los nuevos damnificados son vecinos de Honda, población del departamento central del Tolima, que desde el sábado sufre los embates de crecientes del río Gualí.
La nueva víctima fatal es un soldado que fue sepultado por un alud de tierras en la zona rural de Otanche, localidad esmeraldífera en el departamento de Boyacá, según precisó el comando de la brigada del Ejército en Tunja, la capital de esta región.
La fuente explicó que Rodrigo Díaz Molina, de 37 años, perdió la vida cuando intentaba con otros uniformados desatascar el vehículo en el que se transportaban.
Mientras los nuevos damnificados son vecinos de Honda, población del departamento central del Tolima, que desde el sábado sufre los embates de crecientes del río Gualí.
El río mantiene en emergencia el centro de la zona urbana de la localidad, dijo a la prensa su alcalde, Carlos Alberto Arce, quien indicó que las avenidas destruyeron unos 30 domicilios, entre ellos la sede del archivo histórico municipal.
Las autoridades meteorológicas pronostican que este segundo periodo lluvioso irá, al menos, hasta finales de diciembre próximo.
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