La pelea entre los mandatarios en Cancún fue reportada por la Embajada de EE.UU. en México, luego de una conversación con el embajador colombiano, Luis Camilo Osorio.
Las diferencias entre dos.
Foto: EFE
Los presidentes Hugo Chávez, de Venezuela, y Álvaro Uribe, de Colombia, están presentes en varios cables filtrados por Wikileaks. En una de esas comunicaciones, enviada al Departamento de Estado desde la Embajada de Estados Unidos en México (26 de febrero de 2010), el embajador estadounidense se refiere específicamente a la pelea que los dos mandatarios protagonizaron durante la Cumbre de la Unidad de América Latina y el Caribe, en Cancún, el 23 de febrero.
En ese cable, el embajador estadounidense, Carlos Pascual, revela una conversación que sostuvo con el representante diplomático de Colombia, Luis Camilo Osorio, sobre el encuentro, que ambos calificaron de “inútil y mal organizado”. Según Pascual, “la cita fue inadecuadamente concebida y pobremente manejada. Se permitió a Venezuela y sus aliados izquierdistas manejar a su antojo la agenda”. Para Luis Camilo Osorio, “el presidente de México, Felipe Calderón, presidió una reunión que fue la peor expresión de una república bananera”.
Osorio aseguró que en dicho encuentro, la delegación colombiana propuso trabajar en una agenda conjunta, pero su propuesta no fue bien acogida. “Los mexicanos no estuvieron interesados, confiados en que tenían todo bajo control”, dijo el embajador colombiano. Y agregó: “Calderón simplemente puso a un puñado de los peores tipos en una habitación, esperando ser más astuto que el resto. Sin embargo, Brasil lo relegó completamente y así mismo éste fue superado por Venezuela”, comentó Osorio.
En el diálogo los dos embajadores se concentraron en la polémica que generó la confrontación entre Uribe y Chávez en el almuerzo de la apertura oficial, cuando el entonces presidente colombiano le reclamó a Chávez por el bloqueo impuesto al comercio colombiano. Según le dijo Osorio al embajador estadounidense, “contrario a lo que registró la prensa, Uribe no planteó el problema con Venezuela de forma agresiva, aunque Chávez sí reaccionó de forma emotiva, acusando a Colombia de haber enviado escuadrones de la muerte para matarlo. A las fueras del comedor, los oficiales de seguridad venezolanos forcejeaban con los guardias mexicanos buscando asistir a su Presidente”.
En otro cable, enviado desde la embajada de EE.UU. en Brasil, el ministro de Defensa, Nelson Jobim, insiste en su preocupación por Uribe, a quien califica como “la principal fuente de tensiones”. Jobim dice que los enfrentamientos entre Uribe y Chávez “están dirigidos a las audiencias domésticas por las elecciones en ambos países”.
Finalmente, el cable salido de la embajada en México resalta la opinión de los ministros consejeros de Lula, Antonio Francisco da Costa y Silva Neto, quienes afirmaron que su país manejó mejor la cumbre de lo que lo hicieron los anfitriones mexicanos. “Muy buenas las intenciones de Calderón, pero la Cumbre no fue un ejemplo de un paso nuevo y audaz en el futuro, sino más bien un recordatorio de México en tiempos de confusión”, concluye el embajador estadounidense.
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